Joan Miró nace en Barcelona en 1893 y fallece en Palma en 1983.
No obstante, se formará como persona y artista en Mont-roig, París, Mallorca y más adelante Nueva York y Japón.
Después de la Segunda Guerra Mundial, abandona su exilo en Francia y se dirige a Palma de Mallorca, que se convertirá en su espacio de refugio, trabajo y finalmente en su lecho de muerte. El paisaje de Palma será determinante para su obra.
Una de las características de Miró será su arraigo con la tierra y el interés por los objetos cotidianos, además del entorno natural. Por otra parte, huye totalmente del academicismo, para crear una obra global y pura, no vinculada a ningún movimiento. Es a través del hecho plástico donde podemos observar la rebeldía del artista, además de una gran sensibilidad por los acontecimientos del momento. De esta manera, creará un lenguaje único, que le situará como uno de los artistas más importantes del siglo XX.
(Véase en: https://www.fmirobcn.org/es/joan-miro/ )