Sevilla, 1934.
Carmen Laffón destaca por una obra en la que los objetos y escenarios cotidianos se convierten en la excusa para pintar atmosferas íntimas y emotivas, las cuales traslucen una existencia al tiempo plácida y solitaria. A lo largo de más de treinta años de carrera, los temas que dominan su producción artística son el paisaje y el bodegón. A estos se añade el retrato, que practica tanto desde la pintura y el dibujo como desde la escultura, en la que se introduce a mediados de los años sesenta. Ya en 1992, aún joven, tuvo una exposición retrospectiva en el Museo de Arte Reina Sofía.